El Tribunal Supremo antepone el derecho a la intimidad en el espacio público
El Tribunal Supremo (TS) prioriza el derecho al honor y la intimidad frente al derecho a la información al pronunciarse a favor de la actriz Elsa Pataky en su denuncia a la revista Interviú por publicar unas fotos en las que aparecía desnuda. Las imágenes fueron tomadas, según se especifica en la sentencia, "sin su consentimiento y mientras desempeñaba su actividad profesional" realizando un reportaje para otra publicación en la Riviera Maya.
El Tribunal Supremo (TS) prioriza el derecho al honor y la intimidad frente al derecho a la información al pronunciarse a favor de la actriz Elsa Pataky en su denuncia a la revista Interviú por publicar unas fotos en las que aparecía desnuda. Las imágenes fueron tomadas, según se especifica en la sentencia, "sin su consentimiento y mientras desempeñaba su actividad profesional" realizando un reportaje para otra publicación en la Riviera Maya.
Esta resolución supone un cambio de criterio por parte del Alto Tribunal que, en los últimos años, no siempre ha hecho prevalecer el derecho a la intimidad del personaje famoso cuando era fotografiado en un lugar público.
En este caso, la sentencia analiza con detalle la consideración que ha tenido el Tribunal a la hora de definir el espacio abierto y público en el que se han tomado las fotos. Asimismo ha destacado la importancia de tener en cuenta las circunstancias en las que se realizaron las imágenes, que protegerían a la actriz pese a estar en un lugar público.
Por otra parte, resalta que las publicaciones del Grupo Zeta denunciadas por los abogados de la actriz deberán indemnizarla por un total de 310.000 euros, es decir, una multa con una cuantía mucho mayor que las que habían castigado la intromisión en la intimidad hasta ahora, y que no solían superar los 10.000 euros. Razón por la cual muchos medios optaban por publicar determinadas fotos ya que los beneficios que podían obtener con ellas superaba la multa que podía imponerles un tribunal.
Además, esta sentencia coincide con la publicación en las últimas semanas de unas fotos de la Princesa de Gales, Kate Middleton, y con el enfrentamiento entre la prensa y la Primera Dama francesa, Valerie Trierweiler, por sacar a la luz unas imágenes de sus vacaciones.
Todos estos hechos han contribuido, casi de forma simultánea, a que se haya reabierto el debate, incluso en el ámbito europeo, sobre la importancia de hacer prevalecer o no el derecho a la intimidad de los personajes públicos y el papel que juegan los tribunales en estos casos.
